"El ayni era un sistema de trabajo de reciprocidad familiar entre los miembros del ayllu, destinado a trabajos agrícolas y a las construcciones de casas. Consistía en la ayuda de trabajos que hacía un grupo de personas a miembros de una familia, con la condición que esta correspondiera de igual forma cuando ellos la necesitaran, como dicen: "hoy por ti, mañana por mi" y en retribución se servían comidas y bebidas durante los días que se realicen el trabajo. Esta tradición continúa en muchas comunidades campesinas de Bolivia y Perú, ayudándose en las labores de cocina, pastoreo y construcción de viviendas" (wikipedia).
La tradición ha sido pulverizada en las esferas estudiantiles más abogadezcas, donde pueden apreciarse focos de negación sistemática y fobias autoidiotizantes, rechazo despectivo a los orígenes y disfrazamiento del yo, síntomas todos de una masificación del comercio de los sentimientos. La reciprocidad no es más que un término para designar conductas ancestrales. Y tiene sentido, pues prohibida la gratuidad, todo tiene que comprarse porque todos tienen algo que vender (pipe).
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1 comment:
Pipe
quién no te prestó su cuaderno? :)
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